La actividad turística consiste en una combinación o interacción entre la oferta – productos, servicios y atractivos -, los cuales son ofrecidos a quien a elegido el destino turístico, este constituye el espacio geográfico; el cual se considera la base física donde tiene lugar la conjunción o encuentro entre la oferta y la demanda y en donde se sitúa la población residente, ésta no es en sí misma un elemento turístico pero se considera un importante factor de cohesión o disgregación, según se la haya tenido en cuenta o no a la hora de planificar la actividad turística.
Al igual que otras actividades socio-económicas, la turística, no tiene como resultado la ocupación absoluta y homogénea del territorio. En general los atractivos turísticos son puntuales, están delimitados en áreas o espacios, y aunque en ocasiones puedan abarcar áreas mayores (parques nacionales, reservas naturales, etc.) dejan importantes vacíos donde se localizan otras actividades no turísticas entre ellos.
El espacio turístico puede ser definido entonces como “la consecuencia de la presencia y distribución territorial de los atractivos turísticos que son la materia prima del turismo”. Este elemento del patrimonio turístico, en conjunción con la planta turística (equipamiento e instalaciones) según Roberto Boullón (1985), es suficiente para definir el espacio turístico de un país o región; como lo establece posteriormente en su libro Municipios Turísticos (1990), indicando que “es el área o lugar determinado donde se establece la existencia de la oferta turística y hacia dónde se dirige la demanda turística”; lo que condiciona la existencia del espacio turístico a la presencia de atractivos turísticos. Boullon descompone el mismo en unidades más pequeñas denominadas: zona turística, área turística, complejo turístico, centro turístico y núcleo turístico. y que según la OMT, es el lugar geográfico determinado donde se asienta la oferta y hacia el que fluye la demanda (OMT- 1998)
Como práctica social colectiva, el turismo integra mecanismos singulares de relación que afectan a la identidad del espacio (Hiernaux, 1996) y en tanto espacio para el consumo, incluye múltiples componentes con la función de atender a una clientela generalmente creciente, que usa temporalmente sus instalaciones.
Las actividades turísticas son múltiples, su reflejo espacial es diverso y su configuración particular dependerá de las concepciones sociales que tengan éxito sobre cómo debe ser el espacio-tiempo del ocio en su condición de lugar de evasión respecto al mundo del trabajo y su cotidianeidad.
El producto turístico es consumible de forma inmediata, ya que su valor recreativo del espacio, a diferencia de otros bienes de consumo, no puede ser trasladado, sino que debe ser consumido en el sitio donde se localiza, lo cual conlleva a conflictos con otros usos y actividades instaladas con anterioridad sobre él, dada su condición de recurso no renovable. De manera que el valor recreativo de un espacio evoluciona con el tiempo.
Así pues, el espacio turístico, como asiento de la oferta, es un espacio concreto y objetivo, pero con un valor turístico que varía en función de las circunstancias que lo transcienden como: accesibilidad, existencia de iniciativas, marco jurídico-administrativo, atractivos, etc. (Valenzuela, M. 1986)
Pero además y por encima de cualquier consideración objetiva, dicho espacio es percibido a través de valores sociales (gustos, modas, etc.) que imponen su propia representación del espacio, y que constituyen el valor recreativo del espacio turístico, por lo cual, este alcanza entonces un valor simbólico más allá de su condición física. Simples nombres como Venecia, Las Vegas, París, o Cancún se erigen como símbolo de estatus (Hiernaux, 1996).
La inserción espacial del turismo no debe pasar por alto finalmente el marco territorial que lo acoge y en particular, la existencia en su seno de funciones productivas no turísticas en mayor o menor grado que afectan a la propia forma y a las capacidades de desarrollo espacial del turismo.
SITIO
Son unidades básicas del espacio turístico, agrupan uno o más atractivos y condiciones de interés temático, que acogen al visitante y permiten la realización de diferentes opciones de actividad. Permitan atraer el interés de los visitantes en el ámbito local, regional, nacional o internacional. Los sitios turísticos se subdividen en naturales y culturales.
NÚCLEO
Son agrupaciones menores a cinco sitios de visita. Que deben contener atractivos de alta jerarquía, pero que se encuentran aislados en el territorio y, por tanto, tienen un equipamiento turístico rudimentario o carecen por completo de él.
CONJUNTO
Son producto de la transformación de los núcleos por la provisión de infraestructuras, especialmente de acceso que determinen su cambio de situación espacial. Deben contar con servicios y equipamientos acordes con su naturaleza y jerarquía de los atractivos.
ÁREA
Son las partes en que se puede dividir una zona. Debe contar con:
• Al menos cinco sitios turísticos.
• Infraestructuras básicas, de transporte y comunicaciones.
ZONA
Mayor unidad de análisis. Debe contar con mínimo diez sitios turísticos suficientemente próximos de diversa jerarquía y disponer de infraestructuras de apoyo, facilidades, servicios turísticos, un centro turístico receptivo y centros internos, que garanticen la accesibilidad y la conectividad.
CORREDOR
Vía de comunicación o rutas que conectan las zonas, áreas, centros, conjuntos y sitios turísticos. Hay dos tipos: Corredores Turísticos de
Traslado o de Estadía.
CENTRO TURÍSTICO
Es una ciudad caracterizada por la aglomeración, dentro de su territorio, de todos los servicios que requiere un viajero durante el tiempo que permanece en ella. Es el principal elemento de que se compone el espacio geográfico.
MUNICIPIO TURÍSTICO
Termino que se utiliza para delimitar administrativamente el espacio coincidiendo con los límites de las áreas territoriales de los municipios y definiendo así, por extensión, los limites de competencia de los entes locales en las gestiones y actuaciones en el tema de política turística.
DESTINO TURÍSTICO
Según Bull en 1994, establece que es: “País o región o ciudad hacia el que se dirigen los visitantes, siendo ese el motivo u objetivo a alcanzar”. Otros especialistas establecen que además de ser el país objetivo del visitante, para ser considerado el destino turístico, en le mismo debe haber una concentración de instalaciones y servicios diseñados para satisfacer la motivación que basa el traslado y las necesidades básicas que de allí se generen.
FUENTE: Planificación del Espacio Turístico y Municipios Turísticos. Roberto Boullón, 1985.
De lo anterior se desglosa que en el destino se encuentra instalado o ubicado el producto turístico que consumirá el visitante y que el mismo es, un sistema territorial de características particulares por su finalidad social, que cuenta como elementos primarios básicos (materia prima) con sus atractivos y atracciones y con elementos secundarios que posibilitan su consumo: alojamientos, entretenimientos, comercios, etc. (Vera y otros, 1997).
No comments:
Post a Comment